1 Por la Iglesia: que seamos transfigurados más y más en la imagen y semejanza de Cristo.
2 Para la gracia de escuchar: que escuchemos la voz de Cristo en nuestra oración, en los eventos y en nuestras relaciones, para responder mejor a la invitación de Dios.
3 Para ser librados del miedo: que Dios nos limpie nuestros corazones para vivir en la libertad de los Hijos de Dios.
4 Para el coraje: que nosotros, igual a Abraham, salgamos adelante, dejando atrás todo lo conocido para llegar dónde todo es nuevo, los lugares y las relaciones también.
5 Por todos que están enfrentando una crisis, una pérdida o otros atrasos en su vida: que ellos experimenten la gracia transformadora de Dios, confiando que Dios les guíe a una nueva vida abundante.
6 Por los candidatos que están preparándose para la comunión plena con la Iglesia Católica: que Dios les ilumine para apreciar la nueva vida adentro, cumpliendo las prácticas de la Cuaresma.
7 Para estar abierto de corazón: que, preparándonos para celebrar el sacramento de La Reconciliación, descubramos el amor sin límites de Dios, que existe para perdonarnos.
8 Por todos que quieren discernir su vocación: que dejen la Palabra de Dios crecer en su vida tan ocupada, para animar a sus corazones.
9 Por todos los descendientes de Abraham: los judíos, los musulmanes y los cristianos: que demos honor a todo lo que compartimos para trabajar juntos contra el mal.
10 Por todos los que comparten los sufrimientos de Cristo, especialmente por los que sufren por su fe: que el Espíritu de Dios les llene sus corazones para darles el ánimo que produce muchos frutos.
11 Por las víctimas de la violencia, especialmente en Milwaukee: que Dios les sane sus heridas, les consuele en su tristeza para experimentar la presencia de Dios cada día.
12 Para apreciar más la Creación de Dios: que la gloria de Dios brille en todo para inspirarnos a cuidar más y más la Tierra.
13 Por las parroquias que están cambiando: que el Espíritu Santo nos guíe en el proceso mientras las parroquias se cierran o se mezclan para compartir mejor el Evangelio.
14 Para acabar con el tráfico de drogas: que Dios nos enseñe el daño de las drogas, especialmente para los jóvenes.
15 Para la paz: que Dios convierta nuestros corazones de la violencia a los caminos de la paz, especialmente en Ucrania, para que todos vivamos en la seguridad.